lunes, 28 de mayo de 2007

Si Tú me olvidas

Quiero que sepas
una cosa.

Tú sabes cómo es esto:
si miro
la luna de cristal, la rama roja
del lento otoño en mi ventana,
si toco
junto al fuego
la impalpable ceniza
o el arrugado cuerpo de la leña,
todo me lleva a ti,
como si todo lo que existe,
aromas, luz, metales,
fueran pequeños barcos que navegan
hacia las islas tuyas que me aguardan.

Ahora bien,
si poco a poco dejas de quererme
dejaré de quererte poco a poco.

Si de pronto
me olvidas
no me busques,
que ya te habré olvidado.

Si consideras largo y loco
el viento de banderas
que pasa por mi vida
y te decides
a dejarme a la orilla
del corazón en que tengo raíces,
piensa
que en ese día,
a esa hora
levantaré los brazos
y saldrán mis raíces
a buscar otra tierra.

Pero
si cada día,
cada hora
sientes que a mí estás destinada
con dulzura implacable.
Si cada día sube
una flor a tus labios a buscarme,
ay amor mío, ay mía,
en mí todo ese fuego se repite,
en mí nada se apaga ni se olvida,
mi amor se nutre de tu amor, amada,
y mientras vivas estará en tus brazos
sin salir de los míos.

Pablo Neruda

martes, 22 de mayo de 2007

Solo eso

Arrugo el papel, y lo tiro,
esparcido quedó,
junto a otros, en el mismo sitio,
¡tan solo eso!

¿Como puedo escribir
sin esos versos,
que se dejaran aferrar?
¡tan sólo eso!

mudo quedé,
¡ya sin aliento!
tratar de componer
¡tan sólo eso!

poner en simples trazos,
los sentimientos,
por mi amor,
¡tan sólo eso!

ojos que traslucen,
alma de mi alma,
amaneceres y noches,
¡tan sólo eso!

trastornado, me siento
y ningún verso,
tan sólo quería, morír
¡sólo por eso!

Remordimiento

Amigo de las sombras y destino,
sediento de estrellas y mañanas,
¿donde estarás cuando cierre
el sol su diario recorrido?
¿cual será el resguardo
si desgaja el aguacero
en abundantes llantos?

Espera, escucho pasos,
¿solo son latidos?
¿es que esta noche
no se llevará el hastió?
¿no es suficiente el olvido,
no es suficiente que los ojos
se tornen ciegos
y la razón un mito?

¡Detente un instante,
considera el desafió!
¿es que la vida misma,
dura obstinada, reclama su cuota,
de alguna historia pasada?
No camines fuera, hace frio
a pesar que el mundo parece
desbordar en recuerdos nunca dormidos,
el aliento, ese aire, que ya cubre
en caricias suaves, las miles de imágenes,
con sus ruidos.

Escapar ¡locura mayor!
temeridad mas absurda,
¡nunca! oyeme bien,
nunca podrás escapar de ti mismo.

lunes, 14 de mayo de 2007

Rima LII

Olas gigantes que os rompéis bramando
en las playas desiertas y remotas,
envuelto entre la sábana de espumas,
¡llevadme con vosotras!

Ráfagas de huracán que arrebatáis
del alto bosque las marchitas hojas,
arrastrado en el ciego torbellino,
¡llevadme con vosotras!

Nube de tempestad que rompe el rayo
y en fuego ornáis las sangrientas orlas,
arrebatado entre la niebla oscura,
¡llevadme con vosotras!.

Llevadme, por piedad, a donde el vértigo
con la razón me arranque la memoria.
¡Por piedad! ¡Tengo miedo de quedarme
con mi dolor a solas!

Gustavo Adolfo Bécquer

viernes, 11 de mayo de 2007

Yo no puedo tenerte ni dejarte

Yo no puedo tenerte ni dejarte,
ni sé por qué al dejarte o al tenerte,
se encuentra un no sé qué para quererte,
y muchos sí sé qué para olvidarte.

Pues ni quieres dejarte ni enmendarte,
yo templaré mi corazón de suerte
que la mitad se incline a aborrecerte,
aunque la otra mitad se incline a amarte;

si ello es fuerza querernos, haya modo,
que es morir el estar siempre riñendo:
no se hable más en celo ni en sospecha.

Juana Inés de la Cruz

viernes, 4 de mayo de 2007

Camino

Hoy sali a caminar,
tarde despuntaban las hojas,
otoño maduro de fermentos,
ruidos compañeros de mis pasos.

Manos en apreton sin manos
que quisieran seguir este paseo,
siento el aliento frio,
otoño, mi siempre compañero.

Camino sin sentir los pasos,
camino sin marcar el ritmo,
camino sin dejar las huellas,
camino, solo eso, camino ...

miércoles, 2 de mayo de 2007

El Pozo

A veces te hundes, caes
en tu agujero de silencio,
en tu abismo de cólera orgullosa,
y apenas puedes
volver, aún con jirones
de lo que hallaste
en la profundidad de tu existencia.

Amor mío, qué encuentras
en tu pozo cerrado?
Algas, ciénagas, rocas?
Qué ves con ojos ciegos,
rencorosa y herida?

Mi vida, no hallarás
en el pozo en que caes
lo que yo guardo para ti en la altura:
un ramo de jazmines con rocío,
un beso más profundo que tu abismo.

No me temas, no caigas
en tu rencor de nuevo.
Sacude la palabra mía que vino a herirte
y déjala que vuele por la ventana abierta.
Ella volverá a herirme
sin que tú la dirijas
puesto que fue cargada con un instante duro
y ese instante será desarmado en mi pecho.

Sonríeme radiosa
si mi boca te hiere.
No soy un pastor dulce
como en los cuentos de hadas,
sino un buen leñador que comparte contigo
tierra, viento y espinas de los montes.

Ámame tú, sonríeme,
ayúdame a ser bueno.
No te hieras en mí, que será inútil,
no me hieras a mi porque te hieres.

Pablo Neruda